Sobre la Declaración Política de la Reunión de Alto nivel sobre Cobertura Universal de Salud: Avanzando Juntos hacia un Mundo más Saludable
Sobre la Declaración Política de la Reunión de Alto nivel sobre Cobertura Universal de Salud: Avanzando Juntos hacia un Mundo más Saludable
Antonio Hernández Reyes MD MSP
Red de Sistemas y Políticas de Salud de ALAMES
GT Salud Internacional y Soberanía Sanitaria de CLACSO
A continuación se presentan reflexiones para la discusión sobre la Declaración Política de la Reunión de Alto Nivel sobre la Cobertura Universal de Salud (CUS) llevada a cabo en septiembre de 2019 en Nueva York, en la que se señala:
1. La ausencia del interés por fortalecer sistemas de salud con carácter público y universal.
Todo el discurso alrededor de la declaración sobre la CUS gira entorno a “12. Reconocer la importancia fundamental de la equidad, la cohesión social y la protección social”; sin embargo, es ambiguo a la hora de establecer una ruta para alcanzar estas metas globales ya que delega “10. La responsabilidad primordial a los gobiernos para determinar su propio camino hacia el logro de la cobertura universal de salud”; en otras palabras, lejos de convenir en conformar sistemas nacionales de salud o integrar sistemas de salud fragmentados, llama a “20. (…) fortalecer los marcos regulatorios y legislativos que conduzcan a alcanzar la CUS”.
En este juego de palabras y disputa por el discurso, se trata de equiparar la prestación de un servicio privado con uno público o, como en muchos casos, se prima lo privado sobre lo público, instándose, entre otras cosas, a “40 (…) construir una asociación más fuerte con las industrias” que pone en evidencia la falta de interés por fortalecer sistemas de salud públicos y universales.
2. La utilización de la APS no como una estrategia de universalización de la salud, sino como una herramienta reducida del primer nivel de atención y sometida a la CUS.
Después del gran retroceso que se mostró con la Declaración de Astana en el que la Atención Primaria de Salud (APS) paso de ser la estrategia para alcanzar la Salud para Todos en la Declaración de Alma Ata a una reducción conceptual en el que nuevamente se interpretó como el primer nivel de atención en Astana, en esta declaración la definen como “11.(…) el enfoque más inclusivo, efectivo y eficiente para mejorar la salud física y mental de las personas, así como el bienestar social” , y animan a “37. Ampliar la entrega y priorizar las inversiones en atención primaria de salud como la piedra angular de un sistema de salud sostenible y la base para lograr la cobertura universal de salud”, despojando a la APS de su significado de lucha por el Derecho a la Salud y redefiniéndola como un mecanismo para la cobertura financiera.
3. El no declarar la gratuidad de los sistemas públicos de salud abre paso a la lógica del aseguramiento sanitario derivando fondos públicos hacia aseguradoras privadas.
A pesar de insistir que “12 (…) Garantizar el acceso a la salud sin dificultades financieras…” es una falacia que promociona seguros públicos, que facilita la expansión de las aseguradoras y prestadores de servicios de salud privadas, sigue siendo parte de la definición compartida de la OMS y el Banco Mundial sobre la CUS.
Al declarar que: “10(…)nos comprometemos detener el aumento del gasto en salud catastrófico de su bolsillo al proporcionar protección contra riesgos financieros” no se menciona la abolición de pagos directos y/o copagos ni siquiera es un tema de agenda; por el contrario, se estimula el modelo de aseguramiento que ha fracasado en la región desde hace varios años.
La narrativa la instalan a partir de requerir un “7 (…) cambio de paradigma” en el que se garantice que “6 (…) el uso de estos servicios no exponen a individuos y familias a dificultades financieras”. Este cambio de paradigma consiste en “30. Seguir políticas de financiamiento de la salud para eliminar las barreras financieras al acceso,… reducir los pagos de bolsillo y garantizar la protección financiera para todos”, a través de “32. Aumentar el gasto público interno” “34(…) en un 1% al 2% adicional del PIB” y ” 36. Explorar formas de proporcionar finanzas adecuadas, predecibles y sostenibles para apoyar los esfuerzos nacionales… incluidos mecanismos de financiación tradicionales e innovadores”. En otras palabras, reforzar el presupuesto público de salud para que se reorienten los fondos para financiar seguros de salud a empresas privadas para aumentar una cobertura (nominal) en sistemas de salud con separación de funciones.
4. El llamado es a continuar dependientes del sector privado, la cooperación internacional vertical y el filantrocapitalismo y no transitar hacia una soberanía sanitaria.
La Declaración hace el llamado a “3. Involucrar a todas las partes interesadas relevantes, incluidas la sociedad civil, el sector privado, las fundaciones filantrópicas,… mediante el establecimiento de plataformas de gobernanza participativas y asociaciones de múltiples partes interesadas, en el desarrollo e implementación de servicios sociales y de salud”. La incorporación del sector privado, el filantrocapitalismo de las grandes corporaciones y la cooperación internacional vertical continuarán con su cooptación de las agendas sanitarias, la imposición de políticas flexibles a sus intereses financieros y el establecimiento de medidas de contención del riesgo en salud, minimizando la capacidad rectora y reguladora de los Estados sobre sus propios sistemas de salud.
Se promueve “55. Recopilar datos, incluidas estadísticas vitales, desglosados por edad, sexo, ingresos, discapacidad, ubicación geográfica, estado, educación y otras características sociales” datos que pueden conformar el Big Data que necesita el Complejo Médico Industrial Farmacológico y las empresas transnacionales para continuar su proceso de medicalización de las poblaciones y perfeccionar sus estrategias de mercadeo de la salud.
Desde la Red de Sistemas y Políticas de Salud de ALAMES hacemos un llamado a construir soberanía sanitaria que inicie con sistemas de salud públicos, universales y gratuitos, financiados por impuestos generales que contribuyan a las protecciones sociales para la igualdad, justicia y emancipación de nuestras sociedades.
Comentarios
Publicar un comentario